Con el cambio de sus horarios de atención el flujo de visitantes nacionales y extranjeros se ha incrementado en un 30 % el Museo de Arqueología, Antropología e Historia de la Universidad Nacional de Trujillo, gracias a la actual labor de promoción del museo.

La iniciativa fue promovida por el actual director, Mg. Ricardo Morales Gamarra, quien dispuso que el nuevo sea de lunes a sábado de 9.00 a.m. a 5.00 p.m. y los domingos y feriados de 9.00 a.m. a 1.00 p.m., favoreciendo de esta manera a los escolares de nuestra provincia que ahora tienen mayor tiempo de atención.

El Museo de Arqueología, Antropología e Historia UNT ocupa las instalaciones de la Casa Risco, ubicada en la intersección de los jirones Junín y Ayacucho. Los cambios en los horarios empezaron a regir desde de enero del presente año.

VISITAS
En el 2009 las visitas nacionales y extranjeros, de enero a setiembre alcanzaron la cantidad de 2 mil 929 personas, en tanto que los escolares en el mismo periodo fueron 2 mil 397.

Para este año, los visitantes nacionales y extranjeros, de enero a setiembre 2010 prácticamente llegaron casi al doble del año pasado, pues se registraron 4 mil 105 personas. Similar situación ocurrió con los escolares que en estos primeros 9 meses llegaron 4 mil 031registros.

“La idea es hacer del Museo de Arqueología de la UNT un ente dinámico que permita al visitante visualizar en su recorrido el proceso de evolución cultural del hombre en la costa norte del Perú, que abarca desde el hombre de Paiján hasta la influencia Inca en los Chimú”, manifestó Morales Gamarra.

Igualmente, anunció que están preparando la inauguración de cuatro salas para exposiciones temporales, que se espera concite la atención no solo de los turistas, sino también del público trujillano en general.

MÁS DATOS:
El museo en la actualidad deja de ser un monumento pasivo o sacro, etimológicamente proviene de una raíz latina “museum” que significa Casa de la Musas.

En su concepción moderna según los estatutos del ICOM (1961-1968) se define como todo establecimiento permanente, administrado en beneficio del interés general para conservar, estudiar, hacer valer por medios diversos y, sobre todo, exponer para deleite y educación del público un conjunto de elementos de valor cultural: colecciones de objetos artísticos, históricos científicos y técnicos, jardines botánicos y zoológicos y anticuarios.Las bibliotecas públicas, los centros de archivos que mantienen en salas de exposición de manera permanente, serán asimiladas a los museos.