Es considerado el mejor partido de octavos de final hasta el momento, aquel que tuvo goles, remontada y emoción de principio a final. Bélgica  y Japón se jugaron todo y finalmente fue el seleccionado belga quien logró llevarse el triunfo por 3 a 2.

Japón sorprendía a topdos marcando el primero del encuentro a través de Genki Haraguchi y luego aumentó la diferencia con gol de Takashi Inui. Pero Bélgica puso el descuento con tanto de Jon Vertonghen, empató el compromiso Marouane Fellaini y el para lograr la remontada se encargó Nacer Chadli.